sábado, 3 de marzo de 2012

Crónica de las confesiones de un artista... de los pies a la cabeza.


Después de una noche intensa como la de ayer, se hace difícil saber por dónde empezar, encontrar las palabras adecuadas, si aquellas dos horas intensas te habían dejado sin ellas. 
Mi primera impresión fue de incredulidad, después de tantos años creciendo con sus canciones, desde pequeñita con su etapa en Los Piratas hasta su etapa en solitario, por fin había llegado el día. Tantos años escuchando su voz, esa voz, a través de unos auriculares o un altavoz, a tenerlo justo enfrente de ti. 
Sí, por fin ese momento había llegado. Así que no, no voy a ser objetiva e imparcial con esta  crónica porque simplemente cuando te has dejado  la voz y los pulmones en el suelo de una sala eso se hace imposible.
A las 23.30 aparecieron en escena, Iván y Amaro, Amaro e Iván, un piano y una guitarra, y nada más. Tampoco hacía falta. Los acordes comenzaban, la piel se iba poniendo de gallina y los pelos de punta. Un conjunto de canciones perfectamente elegidas ayudaron a ello. Canciones centradas principalmente en su nuevo disco en directo, aunque no faltaron canciones de otros de sus álbumes ni de su época pirata, desde Ciudadano A a 'M', o versiones de canciones de otros artistas, como Vidas cruzadas de Quique González o 1999, de mis también adorados Love Of Lesbian, que, aunque digan que una versión nunca superará a la original, lo cierto es que Iván sabe perfectamente como hacerlas suyas. 
Y cómo olvidar ese final de Promesas que no valen nada, en el que un público completamente entregado, cantando por el propio Iván, dio paso a Insurreccición. 
Poco a poco el concierto iba llegando a su fin, y la verdad es que esas dos horas se me quedaron cortas. Sólo los artistas más grandes consiguen dejarte con ganas de más y yo hoy hubiera repetido sin dudarlo.
Es extraño, y bonito a la vez ver como aquellas canciones que tantas veces y en tantos momentos te han acompañado, te han comprendido y te han arropado en tus horas bajas, con las que tantas veces te has sentido identificada, toman vida ante tus ojos. 
Como ya he dicho antes, se hace difícil definirlo con palabras; esa es la magia de la música, esta es la magia convertida en música.
Iván, Amaro, el puto placer ha sido nuestro.




Por último, aquí os dejo un trocito del concierto, 'M'. Disfruten.

No hay comentarios:

Publicar un comentario