miércoles, 3 de octubre de 2012

I'm lonely, I'm all right.

Tengo ganas de llorar y no lo hago. Tengo ese puto nudo en la garganta, esa soga áspera y gruesa que me parte en dos pero no llega a ahogarme. He decidido entrar en el juego, no sé cómo ni por qué. A estas alturas todo me da igual. No hay nada demasiado importante. Lo nuevo, lo bello, la incertidumbre y mi inocencia quedaron sepultadas hace ya mucho. Y eso tampoco me importa. Podría decirse que desde entonces he ido creciendo, o he ido dándome de morros contra la realidad. Podría decirse también que soy fuerte y débil a partes iguales pero que en realidad todo me afecta y termino escondiéndome en el mismo rincón de siempre. Es la desesperación de quien se ha perdido en un laberinto infinito cuando llegan las sombras. Y sí, así estoy, perdida en mi laberinto sin saber escapar, o quizá es que simplemente no quiero escapar. Siempre he sabido con rotunda certeza que los enemigos no existen, que mi peor enemigo soy yo. Porque quizá en el fondo me gusta este estado melodramático, tan poético y tan artístico. Quizá solo sea una pose, una postura ante el mundo, o quizá simplemente sea así. No lo sé.
A lo mejor es que me gusta estar sola escuchando a Nick Drake para hacer de su dolor el mío y de vez en cuando, cuando lo necesito, doy pie a mi instinto animal, me pinto los labios de rojo y me dejo llevar, para que de noche en noche alguien me abrace y me pueda recomponer otra vez. Es posible que ande buscando algo inexistente, o que ese algo inexistente ya lo haya encontrado y me he dado cuenta cuando ya no había nada que hacer. Tarde, como siempre. Mi falta de valor en mitad de camino, cual obstáculo insalvable deteniéndome otra vez. Qué novedad.
O también puede que sea el otoño, que pinta mi vida aún más gris de lo que ya era, por ponernos poéticos. Qué sé yo.
Ahora bebo cada vez que sale la luna a pasear, creo que ya no recuerdo cómo era mi yo sobrio. Echémosle la culpa al ron o a la ginebra, al whisky y a la cerveza, cierra los ojos y muérdeme, pero déjate llevar de una vez, coño, que para algo hace rato que he dejado de escucharte.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Encuentros nocturnos a medianoche, Parte I.

Sentada en el diván de los huesos rotos todo y nada se hace más reconfortante. Pero aquí nadie me conoce, y me siento bien. Tú tampoco, aunque no me creas y aunque creas que, a veces, puedes ver a través de mi piel desnuda. Tú, que ves mis entrañas, mis venas, mis latidos y te pierdes en ese laberinto que tengo por corazón. Un corazón-coraza, como decía Benedetti, para ser más exactos. Un corazón que en su día, frágil y débil, quedó noqueado, y desde entonces me he dedicado a ir recomponiéndolo en los mil y un pedazos que quedaron de él. De darle un par de capas de pintura, para que al menos, pareciera nuevo. Pero sobre todo de proteger de las embestidas que el destino se encarga de propinarle. Ya no creo en nada ni a nadie. Me volví agnóstica por necesidad y aquí me ves, sola, bebiendo minutos de placer, buscando abrazos en contenedores que me hagan sentir bien, palabras que me adulen el cerebro, me lobotomicen y así, me deje llevar.
 Pero a quién pretendo engañar. Por muy entera que me veas, por muchas corazas que me ponga alrededor, la podedumbre se asentó en mis huesos y a penas puedo mantenerme en pie, y por muy fuerte que quiera parecer, estoy y siempre estaré rota, ganada y vencida. Y por mucho que intente apartar a la gente de mi alrededor, aún queda una pequeña parte de mí que pide que te quedes, que se ahoga, que se muere por beber algo de cariño. Pero la vida, mi vida, es así. Un conjunto de retales e historias incompletas, de recuerdos de noches estrelladas y de suspiros que se hunden, como un barco a la deriva y no hacen nada por salir a flote.

jueves, 5 de abril de 2012

She bangs the drums.

(21:37) Entré al bar que hacía tanto que no pisaba. El mismo olor de antaño, el mismo tropezón con el escalón. También, como de costumbre, sonaba Sabina y en su honor me acerqué a la barra y decidí pedirme un whisky, pero sin soda. Y me acerqué a aquel sofá, el del rincón. La luz seguía fundida, el hueco en el asiento izquierdo y las manchas en la tapicería. La mesa continuaba rallada y el hueco de la esquina derecha seguía quemado.
Resultaba irónicamente reconfortante, que todo aquello no hubiera cambiado un ápice desde la última vez. Resultaba irónico ver que tras el caos que vivieron nuestras vidas después de aquella última vez todo aquí seguía en orden. Quizá, si hubiera vuelto antes me habría parecido una broma macabra, pero extrañamente me sentía bien. Me alegraba ver cómo, mientras nada había cambiado a mi alrededor yo sí que lo había hecho. Siempre pensé que lo que nos hace madurar no son los errores, sino las heridas, esas que no curan pero dejan costra y es esa misma costra la que te hace más fuerte. Las cosas ya no son como antes. Ya no busco amores eternos, sino temporales y pasajeros, de esos que pasan y no dejan huella. Aprendí a dejar de lado los compromisos y asumí que la felicidad no existía, pero el sentimiento de libertad era bastante semejante.
Pero casi sin darme cuenta las horas pasaron. El whisky iba acabándose y los hielos derritiéndose. Regresé a la barra, pedí la cuenta y me largué.
Casi se me olvida decirte que ahora sí, el lugar ya no es el mismo: Sonaban los Stone Roses, el sofá tiene un hueco nuevo, y volvió a llover, pero esta vez no llevaba paraguas.


The past was yours but the future's mine, you're all out of time

domingo, 25 de marzo de 2012

Dibujando a: Pete Doherty


Que amo a Pete Doherty no es ninguna novedad, y que The Libertines y Babyshambles, bajo mi punto de vista, son unas de las mejores bandas que ha dado Inglaterra en las últimas décadas, tampoco. Y por ello el capítulo de hoy de dibujando a... va dedicado a este gran artista. Pintor, actor, y sobre todo músico, poeta y genio.
Se me hace imposible elegir un disco, tanto de su época en The Libertines (Up the Bracket, The Libertines y el recopilatrio Time for Heroes) como con los Babyshambles a partir de 2005 (Down in Albion, The Blinding y Shotter's Nation) y más tarde en 2009 con su magnífico Grace/Wastelands en solitario. La lírica, su voz, esa voz que toca todas las fibras sensibles o te hace cantar a su compás son únicas y son las que hacen que los que conocen a Pete como artista subrayen su genialidad por encima de ese Pete polémico y ex de- que otros muchos hacen notar.
Llegó hace años a mi vida y desde entonces no ha salido de ella. Es de los pocos que día sí, día también pasa por mis oídos.
Es la unión perfecta del típico dandy inglés de borsalino, camisa y traje, unido a la trinidad rockera de sexo, drogas y Rock n' Roll, ¿qué más pedir?
Por último, aquí os dejo una de sus canciones, Beg, Steal or Borrow, y un enlace de una increíble fotógrafa que encontré por casualidad mientras buscaba una foto para plasmarla en papel: se llama Hedi Slimane y tenéis que conocerla. Disfruten.

"But if I beg steal or borrow, just to hold on tighter  to all the sorrow  tries to choke  
If I change my tune maybe well I won't be bound to doom. 
Well I wont be bound to doom, and I wont be bound to."

sábado, 3 de marzo de 2012

Crónica de las confesiones de un artista... de los pies a la cabeza.


Después de una noche intensa como la de ayer, se hace difícil saber por dónde empezar, encontrar las palabras adecuadas, si aquellas dos horas intensas te habían dejado sin ellas. 
Mi primera impresión fue de incredulidad, después de tantos años creciendo con sus canciones, desde pequeñita con su etapa en Los Piratas hasta su etapa en solitario, por fin había llegado el día. Tantos años escuchando su voz, esa voz, a través de unos auriculares o un altavoz, a tenerlo justo enfrente de ti. 
Sí, por fin ese momento había llegado. Así que no, no voy a ser objetiva e imparcial con esta  crónica porque simplemente cuando te has dejado  la voz y los pulmones en el suelo de una sala eso se hace imposible.
A las 23.30 aparecieron en escena, Iván y Amaro, Amaro e Iván, un piano y una guitarra, y nada más. Tampoco hacía falta. Los acordes comenzaban, la piel se iba poniendo de gallina y los pelos de punta. Un conjunto de canciones perfectamente elegidas ayudaron a ello. Canciones centradas principalmente en su nuevo disco en directo, aunque no faltaron canciones de otros de sus álbumes ni de su época pirata, desde Ciudadano A a 'M', o versiones de canciones de otros artistas, como Vidas cruzadas de Quique González o 1999, de mis también adorados Love Of Lesbian, que, aunque digan que una versión nunca superará a la original, lo cierto es que Iván sabe perfectamente como hacerlas suyas. 
Y cómo olvidar ese final de Promesas que no valen nada, en el que un público completamente entregado, cantando por el propio Iván, dio paso a Insurreccición. 
Poco a poco el concierto iba llegando a su fin, y la verdad es que esas dos horas se me quedaron cortas. Sólo los artistas más grandes consiguen dejarte con ganas de más y yo hoy hubiera repetido sin dudarlo.
Es extraño, y bonito a la vez ver como aquellas canciones que tantas veces y en tantos momentos te han acompañado, te han comprendido y te han arropado en tus horas bajas, con las que tantas veces te has sentido identificada, toman vida ante tus ojos. 
Como ya he dicho antes, se hace difícil definirlo con palabras; esa es la magia de la música, esta es la magia convertida en música.
Iván, Amaro, el puto placer ha sido nuestro.




Por último, aquí os dejo un trocito del concierto, 'M'. Disfruten.

domingo, 26 de febrero de 2012

Dibujando a: Devendra Banhart.


El dibujo de hoy va dedicado a Devendra Banhart, cantante y compositor de indie-folk y dibujante nacido en Texas y criado entre Caracas y los Ángeles. Si bien descubrí su música no hace mucho, lo cierto es que se ha convertido en uno de mis cantantes favoritos. Su voz es única y sus canciones son auténticas maravillas desde I feel just like a child, Baby a Carmensita o Santa Maria da Feira, pasando por obras maestras como Rats. Son la banda sonora perfecta para muchos momentos. Escucharlo es un auténtico placer para los oídos y además, se ha convertido en una gran inspiración para mí.
Lo dicho, os dejo con mi ilustración (aunque sea difícil hacerle justicia a su belleza), un link a su página web donde escuchar sus canciones en streaming y mi recomendación en forma de música. Disfruten.


"You showed me a sunset overflowing, but who cares where it's going 
as long as you're next to me"

sábado, 25 de febrero de 2012


-No voy a decir que cuidaré de ti, ni siquiera sé cuidarme. Es posible que sea yo quien necesite que lo salven.

domingo, 29 de enero de 2012

Let it out.

Las salidas de emergencia no siempre se encuentran en los laterales, ni en las puertas de atrás. Y no siempre las cosas salen como uno quiere. En el centro de mi caos está la creatividad. Y ese centro es mi vía de escape, mi mundo paralelo. Porque cuando no hay nada que logre sostenerme aquí y apago la luz, cierro los ojos y me dejo llevar.
Pero desgraciadamente el equilibro no existe y a veces la realidad pesa demasiado.


An uneasy feeling churns inside of me
I'll draw it on a wall for you all to see
Trying to find a diamond in an avalanche
But you just haven't had the chance

viernes, 6 de enero de 2012

¿Qué apareció antes, la música o la miseria?


“¿Qué apareció antes, la música o la miseria? Se preocupan porque los niños juegan con armas o ven vídeos violentos, por si les domina una especie de cultura de la violencia y les da igual que los niños escuchen miles, y digo miles, de canciones sobre sufrimiento, rechazo, pérdida, miseria y dolor. 
¿Escuchaba música pop porque estaba deprimido o estaba deprimido porque escuchaba música pop?"

Así es como comienza una gran película, Alta Fidelidad. Y desde luego tiene razón. La música es la única capaz de hacer mover tus pies, de alegrarte en los momentos más bajos o de acompañarte en tus miserias, de reconfortarte, de hacerte sentir, de transportar, calma, paz y euforia. Coger un vinilo, pincharlo con la aguja y disfrutar, identificarte con esa letra, enlazar un momento a esa canción concreta, erizarte con un solo de guitarra, enamorarte de un disco, formar poco a poco la banda sonora de tu vida. Porque cuando sientes la música como una parte de ti, cuando la interiorizas realmente, es entonces cuando pasas a ser incapaz de entender tu vida sin ella.

miércoles, 4 de enero de 2012

Dibujando a: Joaquín Reyes.

Esta vez, el capítulo de Dibujando a... va dedicado a este gran hombre, Joaquín Reyes (conocido primero como monologuista en Nuevos Cómicos de Paramount Comedy, luego con La Hora Chanante, Muchachada Nui, Museo Coconut, Noche Sin Tregua, Smonka!, Lo + Plus... además de tener el placer de verle en el cine, entre otras  muchas grandes cosas).
Para quienes le hayáis visto alguna vez, en monólogos, Testimonios o Celebrities, sabréis de lo que hablo y a quien no le recomiendo que lo haga, pero que lo haga ya, porque se está perdiendo a uno de los mejores cómicos que este país (Albacete, en concreto) ha aportado a la humanidad.
Desde Björk hasta Bono de U2, pasando por Agata Ruiz de la Prada, Axl Rose, Ferrán Adriá, John Galiano, la Mona Chita y un larguísimo etc. Todo en uno, este hombre no para. De hecho, también recomiendo que echéis un vistazo a sus dibujos, pues es un artista en todos los sentidos. De sus manos han salido personajes tan entrañables como Enjuto Mojamuto, Super Ñoño o Bizcoché y Ojos de Huever. 
Lo descubrí un día cualquiera, hace años, haciendo zapping, cuando de repente dí por casualidad con La Hora Chanante, junto a los también grandes (y enormes) Ernesto Sevilla, Carlos Areces, Julián Lopez y Raúl Cimas, y desde entonces, este grupo de cómicos consiguió enamorarme, sacarme sonrisas a cascoporro.
Y como no podría ser de otra manera, la entrada de hoy no va acompañada de alguna recomendación musical, sino recomendación humorística. Pártanse el ojete. Que disfruten de Joaquín Reyes: